L@s que me conocen saben que disfruto de mi trabajo.
Y, aunque la vuelta al cole después de las vacaciones se me hace un poco cuesta arriba, como a todo el mundo (y más a medida que me hago mayor), esto no es lo que llevo peor.
Lo que peor llevo y lo que más me molesta es que hayan adelantado una semana la entrada de los niñ@s en la escuela, reduciendo así el tiempo de trabajo docente previo, a 3 miseros días. Y por supuesto no me preocupa para nada tenerlos una semana más, yo soy maestra por y para ell@s. No estoy de acuerdo con esta acción por otras razones; aunque evidentemente puedo empatizar con las familias a las que esto beneficia. ¿Pero a qué precio?
- Claro está que el motivo de esta conciliación es económico y no social, familiar o educativo. Y aunque sí, puede beneficiar la conciliación familiar, lo hace a costa de que sean los niñ@s quienes pasen más horas en las escuelas en vez de con sus familias. Familias que, por supuesto, deberían tener mejor conciliación familiar gracias a unas políticas laborales que así lo consideren. Y no porque sean los niñ@s quienes paguen la mala gestión del tiempo laboral de esta sociedad. Y todo esto para una “supuesta mejora” en la economía del país.
- Dudo qué adelantar la entrada de los niñ@s una semana, aporte tales mejoras educativas a los infantes. Si sus veranos no son ricos en aprendizajes, quizás deberíamos tener otro tipo de acciones para apoyar y ayudar a aquellas familias más vulnerables en ese sentido. En general deberíamos como sociedad, querer tener a los niñ@s con nosotr@s y, mirar y cuidar su educación como algo bello en lo que tenemos mucho que aportar. Si esa riqueza se produce en casa y en la sociedad, no será necesario que sea también la escuela quien asuma las responsabilidades que otros no contraen.
- Me parece casi como un “insulto” a nuestra profesión que se consideren 3 días suficientes para: conocer la escuela, el equipo docente, conocer el grupo de niñ@s con el que vas a estar, hacer (si es necesario) traspaso de información de los infantes (para atender así las distintas realidades), hacer reuniones de equipo (ciclos, claustros pedagógicos, claustros informativos, comisiones…), programar (como mínimo) los primeros días, preparar los espacios y los materiales, etc.
- Y, con relación a esto último, el currículum nos guía para promover metodologías activas y significativas en espacios ricos y que promuevan la creatividad y el bienestar de quienes los habitan. ¿Y como pretenden que los preparemos con solamente 3 días en los que aparte de esto tenemos todo lo comentado anteriormente por hacer? 3 días no es tiempo suficiente para todos los preparativos de un curso escolar. Con lo que a mí me gusta preparar un buen espacio. Con lo importante que son los espacios. Supernecesario formarnos más en neuroarquitectura, psicología del espacio o como influyen los espacios en nuestras vidas, nuestro bienestar, creatividad, desarrollo, relaciones… Y, ya que me he metido en este tema, la importancia que se doten los centros de dinero que permita a los proyectos educativos ofrecer los materiales, el mobiliario y las estructuras que permitan esta calidad. L@s maestr@s somos más diógenes y manitas de lo que deberíamos. Si se diera el dinero necesario, no nos veríamos (tanto) mirando cartones y maderas en los contenedores.
- Imagino que el resto de mis compañer@s, l@s maestr@s que estaremos en breve en las aulas, estarán de acuerdo que, 3 días, no son suficientes para preparar un curso escolar con calma, cariño, amor, profesionalidad, calidad… 3 días dan para ir con prisas, nervios, estrés, haciendo las cosas rápidas y seguramente mal. Y, ¿quién se lo encontrará así?. Los niñ@s otra vez. Y habrá quien diga, ¡pues déjalo preparado en junio o julio! Pero claro que un comentario así lo hace una persona que no se dedica a la educación y que no vive nuestra realidad y, cuya respuesta a ese comentario, requeriría de otro post para argumentar en contra de ello.
Bien, dicho todo esto, hago un llamamiento para que se empiece a valorar más el tiempo en familia, el bienestar humano y social y sobre todo la infancia y la educación.
Invertir en educación, en la familia, en la infancia y en la sociedad.
Para ello, ¡Ojalá se ponga de moda la educación! #quesepongademodalaeducacion
Perdón a la infancia escolarizada por no poder hacer en estos 3 míseros días lo que se merecen para un óptimo inicio de curso.
Estoy segura, pero, que aunque nos falten días y recursos, la mayoría de docentes comenzaremos poniendo todo nuestro corazón para que sea un buen inicio de curso.
Gracias a tod@s aquellos que aportamos nuestro granito de arena en nuestro día a día para mejorar la educación, la infancia, la sociedad.
Y, no dudes en compartir este escrito si te resuena lo que lees, te sientes identificado con lo que se dice, o bien simplemente porque te gusta o te apetece.
#quesepongademodalaeducacion
Buen inicio de curso.